martes, 9 de septiembre de 2025

EN BALDE...




Los discursos que circularon por las redes en estos días, después de las elecciones provinciales del pasado domingo, no hacen más que actualizar la sempiterna antinomia "civilización/barbarie".

Sobre este tópico, resultan más que interesantes algunas de las películas de Cohn/Duprat: "El hombre de al lado", "Ciudadano Ilustre" y "4x4". ¿Puede haber barbarie en la gente civilizada y civilidad en la gente bárbara? Donde está el límite entre una y otra? 

De este lado de la General Paz sigue, para muchos, continua vigente el mito de que habita la barbarie en su máxima expresión, cuando lo cierto es que en la Provincia de Buenos Aires -como en cualquier otra- existen varios mundos que conviven al mismo tiempo. Contrariamente a lo que se cree, el  filósofo Zizek se pregunta si no es justamente en la palabra donde reside el origen de la violencia.

Algunas cuestiones al respecto. 

1) Si el otro, el que no nos entiende, el que se maneja de forma puramente pasional (es decir irracional) es realmente así, entonces cabe preguntarse qué tipos de gobierno contribuyeron de forma más fuerte para que esto sea de esa manera: es decir, qué tipos de gobiernos restringieron el acceso a la educación, a la salud, al trabajo y a la vivienda, como para  generar las condiciones de posibilidad del surgimiento del supuesto monstruo del que ahora se horrorizan.

2) Si el monstruo está entre nosotros, y si no hay nada que hacer con él, entonces por qué buscar gobernar en su territorio? No se supone que los gobernantes buscan el bien común de su sociedad? Qué bien común se puede conseguir en una comunidad de bestias? Sarmiento y Roca, en ese sentido, fueron más honestos y contundentes en su solución; la gente que no es "apta" para la educación debe ser desalojada del proyecto de país civilizado.

3) Es curioso que, a la hora de señalar a los que votan a los proyectos "demagógico/populistas", hagan mención sólo a los pobres, pasando por alto que también muchos pobres acompañaron con su voto para que el presidente sea quien hoy nos gobierna. Y algo más: pasan por alto, también, que existe una muy larga, larguísima fila de hombres y mujeres de las que, creo, no tienen problemas de índole sanitario a la hora del llamado diario de la fisiología humana, y de las que - de eso sí que no tengo dudas- poseen una formación intelectual de la que carecen muchos de los cacarean en las redes; por nombrar solo algunos: Alejandro Dolina, el Indio Solari, Mauricio Kartun o Martín Kohan.  

En este punto, se me actualizan las palabras de Capusotto: "quieren ser los dueños de un país que odian".

En estos tiempos en los que se habilitó la conversación pública digital sin ningún tipo de restricción (con la paradoja de que los espacios de "conversación real" uno no puede expresar cualquier cosa de cualquier manera y en cualquier momento, y no está mal que así sea) resulta un esfuerzo necesario el de discriminar a los destinatarios de nuestras palabras; distinguir entre un interlocutor válido de aquel al que todo nuestro discurso le resulte indiferente.

Es decir, no hacer esfuerzos en balde. 

martes, 2 de septiembre de 2025

PÀJAROS DE LA CABEZA...

 



"Yo creo que por desdichado que uno sea - y todos lo somos a veces- uno debe agradecer el hecho de vivir. Chesterton dijo: "A un hombre debe bastarle pensar que es un hombre, que está de pie, que está bajo las estrellas." Si eso ya es una felicidad tan grande: el hecho de existir; ahora, existir para siempre? Yo creo que sería bastante desdichado."

"Si uno postula que están disociados, el alma puede ser inmortal, pero esa es una mera conjetura. Si una persona se rompe una pierna, si se rompe una costilla, si le dan un golpe en la cabeza, eso no produce ningún resultado benéfico. Por qué suponer que la muerte, que viene a ser un accidente total, va a mejorar esto. Por qué suponer que la muerte, en la que todo se accidenta en uno, va a conseguir que el alma conozca otro reino, no?"

"Yo diría que el concepto de Dios es la máxima creación de la literatura fantástica. Es mucho más extraña la idea de Dios que la idea del Golem."

"Recuerdo una frase Mark Twain: "Yo no pregunto de qué raza es un hombre, qué religión profesa, qué lugar ocupa en la escala social. Me basta con que sea un ser humano: peor que eso no puede ser."

"Qué cosa rara que los católicos condenen el suicidio cuando el propio Jesucristo fue un suicida. Una religión que tiene a la cabeza un suicida - y ese suicida además, es Dios- y que condene el suicidio. Porque se entiende que el sacrificio de Jesús fue voluntario, es decir, fue un suicidio. Es muy raro, los católicos condenan el suicidio y yo no logro explicarme por qué."

"Una despedida es las dos cosas.  Quizás el momento de la despedida es el momento más intenso en la relación entre dos personas. Cuando uno se despide de alguien, uno está más con esa persona que si uno la ve regularmente. Al mismo tiempo, uno sabe que es la última vez. Quiero decir que en la despedida se dan a la vez la máxima presencia y la máxima ausencia, no?"

"¿Te das cuenta de que, entonces, el cerebro se autoconstruye correctamente porque cuando sus neuronas se equivocan, se inmolan? ¿Te imaginas la eficiencia que tendría una Secretaría de Estado en la que todos los funcionarios se comprometieran a que, si llegan a cometer un error, o si en un momento dado su función deja de ser necesaria, se suicidaran?"

"Millones de personas que anhelan la inmortalidad no saben qué hacer con sus vidas en al atardecer lluvioso de un domingo."

"Para usar el cerebro, el esqueleto y los músculos hay que tener entusiasmo, hay que encontrar un sentido para vivir. Lo otro es meramente durar. Sin sentido no hay entusiasmo y sin entusiasmo no se vive."

"Siempre me acuerdo de una frase, que debe ser china, que dice que no puede evitar que los pájaros revoloteen alrededor de su cabeza, lo que sí puede evitar es que hagan nido allí."

"¿Qué es el humor? Por ahí, también ante la muerte, es el silbido que nos acompaña."


"DIÀLOGOS SOBRE LA VIDA Y LA MUERTE" (L. HEKER)



domingo, 17 de agosto de 2025

EL AGUA DE LOS PUEBLOS...

 





"Federación es un pueblo que nació tres veces y murió solo dos: sigue ganando.

Durante treinta años el pueblo agonizó: estaba condenado y nadie compraba ni vendía ni edificaba casas, esperando las aguas, que tampoco llegaban. Hasta que, en 1974, un referéndum convocó a los vecinos a votar dónde pondrían su nuevo pueblo. Una de las propuestas - la ubicación más cercana - ganó por mucho y enseguida el gobierno de Isabel Perón olvidó todo. Hasta que los militares de la dictadura del 76 lo retomaron a su modo.
Un vídeo de 1977 muestra un pueblito, cómo tantos, tranquilo, agonizando: calles, casas, la iglesia, el cine Rex, la escuela, la municipalidad, el parque parroquial y la estatua del procer: todo está a punto de morir. Pero los militares que estaban por desaparecerlo no quisieron dejarlo bajo el agua - fantasmas raros, cadáveres de casas, la torre trunca de una iglesia - y lo arrasaron antes de inundarlo. Decían que era necesario para que el lago fuera navegable; nunca construyeron las esclusas que harían que lo fuese.
El gobierno del proceso era capaz de ganar un mundial. El gobierno del proceso era capaz de pacificar la nación. El gobierno del proceso era capaz de crear una nueva Argentina. El gobierno del proceso era capaz de construir una ciudad en el tiempo récord de once meses y dieciocho días.
A mediados de los noventa la ciudad languidecia: sus citrus y sus maderas no encontraban mercado, no había fuentes de trabajo. Entonces alguien empezó a preguntar qué pasaba con aquellas raras aguas tibias, y el pueblo decidió cavar todo lo que fuera necesario para ver si realmente eran termales. La Napa que encontraron fue riquísima. El municipio se encargó del resto: construyó un centro termal público y prohibió que ningún privado se quedara con las aguas.
Ahora son quince mil habitantes que prosperan con el turismo - pero también los aserraderos y los cítricos repuntaron, después de los años del desastre. Y el pueblo se ha ido armando: hay un impulso.
Federación es un lugar extraño, calles ordenadas y una costanera muy bonita, la avenida comercial cómo una estación de ómnibus sin ómnibus, los hoteles y residencias repletos de bañistas."
"EL INTERIOR " ( M. CAPARRÓS)

martes, 12 de agosto de 2025

BAJO EL MISMO CIELO...

 "¿Qué vemos cuando miramos al cielo?" A 30 años de "Antes del amanecer", una nueva forma de contar la historia "chico y chica se conocen". Con un pequeño agregado: el amor de una pareja no es más importante que la red de costumbres también amorosas en las que esa pareja se mueve día a día.

La película es de Georgia, y el título -en palabras del director- no nos puede resultar más conmovedor: Messi mira al cielo cada vez que hace un gol. El mensaje -del film, pero también de Messi- es que, si hay algo grandioso en nosotros, eso nos excede, no nos pertenece por completo.



domingo, 10 de agosto de 2025

LA SELECCIÒN NATURAL...

 



"Milei es el portavoz de una parte no menos de la sociedad, que ve como parte del "buen sentido" -para citar a Comte- el hecho de que no haya  efectivamente hambre porque, si hubiere, la muerte por inanición sería una constante a la vista.

Tener hambre no implica morir, sí la sensación de padecimiento: quien escribe, pasó por hambre al final de la década del 90, pero escribe, y por ello, aún no forma parte de  "el show de los muertos" al escribir estas páginas, pues de lo que se trata ante esta sugerencia del supremo mandatario es de la consideración de la espectacularidad del desastre para tenerlo como tal.

Supongamos que sucediera, ¿qué inferimos de ello? Simplemente que semejante evento descansa en una lamentable fatalidad. Al fin y al cabo, como cree Spencer, quien muere por razones de inadaptación evolutiva lo hace por una ley de la naturaleza, por un evento natural, ¿y qué más natural que morir por inanición?  Podrían morir los individuos en una lucha en post de la supervivencia; para ello bastaría, por caso, que el ejemplar del que se trate integre una fuerza de seguridad, o bien, habría de forzarlo a que se enfrente a ella y, por algún accidente debido a una mala utilización de cartuchos disuasivos, perezca.  

Pero Hayek, hay que hacerlo notar, nos consuela, en este punto. El argumento reside en lo siguiente: el mercado no es injusto, solamente retribuye a quien le compensa con capital o con innovaciones. En su lamento Hayek apoya su mano límpida en nuestro hombro, y sugiere lo siguiente: puede ser decepcionante, desde luego que lo es, pero no es injusto. Esto es: alguien puede esforzarse muchísimo, ser un ejemplo viviente de meritocracia y caer en desgracia, resbalar, pues, del mundo. Esto puede ser decepcionante, podemos lamentarlo, pero no es injusto. Porque el mercado es la única fuente de justicia, único modo en que la historia instaura un orden justo.

Después de todo, ¿cómo podría la Historia, la naturaleza, la divinidad o lo que fuera que instaure este orden, equivocarse? De modo que quien muere, muere con justicia -divina, natural, histórica, podemos agregar-, y ya.

Oscar Wilde, gran sensiblero, desliza una opinión, así como de soslayo: cínico, es quien sabe el precio de todo y el valor de nada."


"SENSIBLEROS" (M. DACUY, PÀGINA 12, HOY)

jueves, 7 de agosto de 2025

EL AMOR Y EL RECUERDO...


"Toda vida corre siempre en dos niveles: uno que parece gobernado por la necesidad, si bien no logramos descifrar su ley; y otro abandonado a la casualidad y a la contingencia. Es en vano fingir que entre ellos hay una arcana, demoníaca armonía y, aún así, en el punto en el cual logramos mirarnos sin asco, los dos niveles, aunque incomunicados, no se excluyen ni contrastan, sino que se dan una suerte de recíproca, serena hospitalidad."

"De jóvenes, la mano no sabe lo que busca; sabe, acaso, lo que rechaza, pero eso que rechaza dibuja la forma cóncava de lo que busca, de cualquier modo la guía hacia el bien no visto."

 "Se dice que a los viejos sólo les queda una cuerda para tocar. Y es, tal vez, una cuerda desafinada. Sin embargo, esa nota desafinada suena más larga y profunda que el instrumento intacto de la juventud."

"Lo único seguro es que ya no sabemos dónde estamos de verdad. O mejor aún: sentimos que estamos en un punto, que somos ese punto, ese donde, pero ya no sabemos situarlo ni en el espacio ni en el tiempo. Todos los lugares que hemos habitado, todos los momentos que hemos vivido nos asedian, piden entrar -nosotros los observamos, los evocamos uno por uno. Volverse íntimamente extranjeros para nosotros mismos, ya sin patria. Lo que tenemos -las costumbres, los hábitos, los recuerdos- es demasiado, ya no lo podemos tener."

"Los temas de la vida ahora te parece que casi puedes escucharlos, como en una partitura musical. Los encuentros decisivos, las amistades, los amores son las frases y los motivos que se enuncian y responden en el secreto contrapunto de la existencia, que no tiene pentagramas. E incluso cuando parecen situados en un pasado remoto, los temas de la vida son necesariamente incompletos, como una melodía o una fuga interrumpida que espera ser continuada y retomada. Intentar escucharlos, en la oscuridad. Nada más."

"Es como cuando miras algo en el crepúsculo. No es tanto que la luz sea incierta, sino que sabes que no podrás terminar de ver, porque la luz disminuye. Así se presentan ahora las cosas y las personas: fijadas par siempre en la imposibilidad de terminar de verlas."

"¿Cómo se tiene una potencia? No se puede tener una potencia, sólo se la puede habitar."

"Un hombre que tiene algo novedoso que decir al principio sólo puede ser escuchado por quienes lo aman."

"Conocer significa nacer juntos, ser generado o regenerado por la cosa conocida. Y esto y no otra cosa significa amar."

"En lo que me atañe, pienso que no puede tomarse un libro que se ama entre las manos sin sentir un vuelco en el corazón, ni conocer de veras una criatura o una cosa sin renacer en ella o con ella."

"¿Qué significó para mí el encuentro con Heidegger en Provenza? Sin duda no consigo separarlo del lugar en el cual sucedió; su rostro a la vez apacible y severo, esos ojos tan encendidos e intransigentes no los he visto en nadie más, salvo en sueños. Hay en la vida acontecimientos y encuentros hasta tal punto decisivos que es imposible que entren del todo en la realidad. Suceden, cierto, y marcan el camino, pero nunca terminan, por así decirlo, de suceder. Encuentros, en este sentido, continuos, como los teólogos decían que Dios jamás deja de crear el mundo, que hay una creación continua del mundo. No dejan de acompañarnos hasta el final. Forman parte de lo que permanece inacabado en la vida, que va más allá de ella. Y lo que va más allá de la vida es lo que de ella queda."

"Se ama a alguien porque se lo recuerda y, viceversa, se recuerda porque se ama. Amando se recuerda y recordando se ama y, al final, amamos el recuerdo -es decir, el amor mismo- y recordamos el amor, es decir, el recuerdo mismo. Por esto amar significa no llegar a olvidar, a sacarse de la mente un rostro, un gesto, una luz. Pero también significa que, en realidad, ya no podemos tener un recuerdo de ellos, que el amor está más allá del recuerdo, inmemorable, incesantemente presente."

"AUTORRETRATO EN EL ESTUDIO" (G. AGAMBEN)



lunes, 28 de julio de 2025

LA NECESIDAD Y EL DERECHO...

 



Escucho, los pocos minutos que me aguanta el estómago, el discurso presidencial en la rural. Es difícil salir del asombro que genera tener a un presidente que dice abiertamente que la justicia social es una aberración. Y además fundada sobre una mentira flagrante. Según el presidente, la frase " dónde hay una necesidad nace un derecho" nos lleva a la ruina como sociedad, porque, siguiendo su razonamiento, "las necesidades son infinitas". Esa lógica no resiste el menor análisis; infinitos son los deseos, no las necesidades. Estas últimas son bien concretas: vivienda, trabajo, salud y educación. Tan concretas que se las puede enumerar con los dedos de una mano.

Nada nuevo bajo el sol. A cielo abierto, en campaña, dijo que existe la libertad de morirse de hambre. También a cielo abierto, ya cómo presidente de la nación, lo ratifica a diario.
Se sabe: no es un fenómeno puramente local, pero acá tiene una intensidad que, me parece ,no se alcanza en otras latitudes.
Cuando lo peor haya pasado, es altamente probable que esta época quede en la historia como una de las más extrañas y perturbadoras.