domingo, 13 de enero de 2019

LA LISTA PROPIA...

Resultado de imagen para dialogos en el campo enemigo

"Si un sociólogo no quiere terminar legando al mundo flagelos como el ciclo básico, o presidiendo una AFJP, poniéndose una escarapela en los días de Malvinas, pidiendo un baño de sangre y esas cosas que te ponen en un lugar de imbécil y son festejadas por el público, que te estropean y oxidan las herramientas...porque pensar es fácil: no sabés cuánta operación de pensar, imaginar, calcular, prever, recorrer el archivo de la memoria y todo eso puede hacer un jugador de bridge durante el partido, pero al mismo tiempo, ante la muerte de sus padres, piensa hasta un punto donde se detiene. Porque le dijeron que hay cosas que es mejor no pensar...o porque, sencillamente, tiene temor al miedo. No es como el alcohol, el colesterol o el drogol de moda: se transa con Alfonsín, Galtieri, Menem o con el Chacho y las neuronas siguen intactas. Pero la capacidad de pensar lo que no se debe, exponerse a la propia representación de lo que hace doler, ocuparse en lo que no garantiza un resultado útil para los mercados de ideas, cosas o votos y en lo que ni siquiera da señales de llegar alguna vez a ser expresable en palabras, frases, doctrinas o poemas, esa capacidad se pierde en el ejercicio de transar y servir, que son relaciones sociales equivalentes.
El deber del intelectual es conservar su instrumento, perfeccionarlo, escanear periódicamente el disco rígido y ampliar su RAM, y experimentar cada programa, seguro de esta vez sí se ampliará la promesa que prometen sus diseñadores. Y comprar siempre con la lista de compras tuya, no con la que prepararon los señores Coto y Carrefour."
"El valor, el objetivo de la ética, la moralidad, no es corregir lo que la gente le hace a los demás sino lo que uno se hace a sí mismo."
"No me cabe duda de que mi burla, mi crítica contra el Frejuli y toda la comparsa del 73, así como mi desprecio por el mundial 78, el triunfalismo de Malvinas, se componían en un discurso coherente en cada oportunidad, y a la vista de los hechos, hoy irrebatible. Pero no es que en esos casos yo primero entendí y después me resistí a la alucinación colectiva; fue una resistencia atávica a la comunión masiva lo que me estimuló a articular esas ideas. En resumen: era una mala persona. Sorry: lo sigo siendo."
"El ser humano se mueve por la línea del menor esfuerzo, y es mucho más fácil pensar en el código aprendido del bien y el mal -viste que en tu casa te enseñan lo que está bien y lo que está mal- del ganadores y perdedores de fútbol, y del ricos y pobres de la cultura general, del tener y no tener, es mucho más fácil pensar en ese código que pensar en códigos más...en categorías con más potencial descriptivo y explicativo. Con plata y no plata no se explica, porque a Menem no lo explicás con el deseo de plata. Y con buenos y malos no explicás absolutamente nada porque no hay bien y mal, ningún bien o mal te puede explicar un comportamiento político."
"En esta malversación de la lengua, uno está en el laburo de reprocesar las palabras, y de insistir en esa cosa realista de la univocidad contra las relatividades que permiten que las discusiones sean tierra de nadie. Y cuando las discusiones son tierra de nadie, las discusiones se dirimen por consenso, y cuando el 95 por ciento de las discusiones se dirimen en los medios son máquinas de reproducción de un capital ya no mediático, ni comunicacional, ni lingüístico sino empresario. En ese momento, entonces, una polémica Ferrer-Fogwill se va a dirimir por quién tiene más rating, a quién le tomaron mejor en cámara o quién tiene destrezas para manejarse en el mundo mediático. Esto, si uno pudiera preservar las palabras, no ocurriría así. Yo digo: por supuesto que es una batalla estúpida, pero es una batalla que es la única que podés dar."
"Creo que vivimos una catástrofe mundial de proporción. Un profesor nazi dijo que del peligro viene la salvación, no? Puede ser, yo no creo que sea necesario, viste?
El otro día me hicieron una encuesta por la calle unos pibes del Pellegrini: "qué piensa de los clones?" Y entonces le dije lo que pensaba, que estaba en contra; y entonces después me preguntan: "Y si usted tiene un amigo y se entera que es clon, seguiría siendo amigo de él? ¿iría a la casa de un clon a comer? Le dije: "mirá pibe, si vos me traes una clon de Claudia Schiffer, sabés como le chupo la concha a la clon?" No tengo ningún problema. Pero yo creo que el proyecto de clonar humanos me parece muy pesado, además con el mito de que te van a salvar de algunas enfermedades, qué van a hacer. Eso es una catástrofe. Y más cercana a la catástrofe es la incapacidad de pensar en estas cosas, y además que todo tipo que es capaz de pensar en estas cosas tiene la presión de convertirlas rápidamente en mercancías y convertirse en un bestseller francés, viste?
Y eso también es parte de la catástrofe, cómo el aparato cultural se ha vuelto sensible a estas cosas aparentemente disensuales, y a lo largo de los ciclos editoriales de los últimos quince años vos vas a encontrar que se abortaron decenas de observaciones que tenían un poder generador de conciencia o reordenador de representaciones del mundo y se fueron abortando uno tras otro, viste? Me seguís?"

FOGWILL ("DIÁLOGOS EN EL CAMPO ENEMIGO")

No hay comentarios:

Publicar un comentario